“Un viaje de mil millas comienza con el primer paso.” Lao-tsé

lunes, 10 de octubre de 2011

No.Blog #0, vol.V: No estás.

Caminando despacio, por una tarde gris.
Sin destino ni tiempo, ni nada que perder ni ganar.
No estás.

Y yo, comiéndome los fideos de la sopa, sin música, sin arte ni respiro.

Hoy lavé todos los platos.
No estás.

No estás.
No estás y no lo puedo creer.
No me acostumbro, ni me voy a acostumbrar nunca.
Y nos dijimos la verdad, aunque te me escapabas por entre los dedos.
Dejaste todo, te llevaste todo.
Y me tengo que quedar acá, sin nada que querer, sin poder buscarte entre la gente.
No estás.

Y se me hace lejos, se me hace difícil, duele.
Pero sé que hay cosas en el medio del camino que hay que sacar para poder andar.
Y ahora nos toca escarbar entre los escombros de dos vidas que fueron, y rescatar lo que se pueda para poder seguir. Para poder seguir cumpliendo, estando, muriendo.
Muriendo de lejanía. Muriendo de ganas de vivir.
No estás.

Y se me hace tan raro,
pensarte pero no verte;
sentirte y no encontrarte.
Hablando sin respuesta.
Esperándote.

Comiéndome la existencia
tu ausencia drena todo de color y sentido.
Hoy lavé los repasadores.
Cómo se nota, no estás.

Tendí la ropa, pero era toda mía.
No estás.
No estás.
No estás, te fuiste, cómo puedo encontrarte
ahora en el limbo del aire
entre las tierras
y el mar.

No estás. No estás. No estás.
Tengo miedo, miedo de mí misma, no me quiero encontrar.
Encontrarme sin vos, no soy yo.
Qué es este agujero gris, esta ciudad de furia; cuando ya no tengo más a mi oasis de agua clara.
Arena hasta los confines de todo. Hasta donde me alcanza la vista.
Nada.
Nada.

No estás.
Pero quiero que estés bien, allá donde vayas.
Quiero que te guste tu vida, allá donde estés.
Quiero que quieras, que rías, que llores.
Quiero que no te olvides de nada, que no te olvides de mí.

Tan lejos...
un desierto de nada entre dos vidas,
sólo sombras.

Hasta que vuelvas.
Mientras, no estás.

No hay comentarios: